Descripción
Es un pastel húmedo y jugoso, de sabor inigualable, un sólo bocado de esta deliciosa tarta os dirá por qué se ha convertido en todo un clásico y por qué sigue siendo todo un referente.
Ingredientes
100 g nueces pacanas
340 g zanahorias
200 g harina de repostería
80 g harina integral
4 huevos
200 g azúcar
100 g azúcar moreno
240 ml de aceite de girasol
4 rojadas de piña
2 cucharaditas de esencia de vainilla
1 cucharadita de bicarbonato
2 cucharaditas de levadura química
1/2 cucharadita de sal
2 cucharaditas de canela
Frosting
300 g queso crema tipo Philadelphia
250 g azúcar glas
50 g mantequilla
300 ml nata liquida
Preparación
Precalienta el horno a 180ºC
Engrasa dos moldes de 23 cm pulverizando con espray antiadherente o mantequilla, cubre la base con círculos de papel de hornear y engrasa también el papel.
Comienza tostando las nueces, para ello dispón en una placa de horno las nueces, introdúcelas en el horno hasta que estén fragantes, unos 8 minutos. Transcurrido el tiempo, retíralas y deja enfriar. Una vez frías, tritúralas en trozos pequeños.
Mientras tienes las nueces en el horno, prepara el corte del resto de los ingredientes. Pela y ralla las zanahorias en trocitos pequeños. Corta la piña en dados pequeños. Reserva.
En un bol tamiza la harina, la harina integral, el bicarbonato, la levadura química, la sal y la canela, mezcla hasta integrar todos los ingredientes. Reserva.
En otro bol, con unas varillas mezcla los huevos junto a los dos tipos de azúcar hasta obtener una crema esponjosa y que haya doblado su volumen. Sigue añadiendo el aceite y la esencia de vainilla y bate hasta que haya emulsionado y esté integrado formando una mezcla homogénea.
Incorpora los ingredientes líquidos con los secos hasta conseguir una masa ligera, añade la zanahoria, la piña, las nueces y mezcla hasta obtener una masa homogénea.
Divide la masa de forma uniforme entre los dos moldes preparados, y hornea durante 30 minutos aproximadamente o hasta que pinches con una brocheta y esta salga limpia.
Retira los moldes del horno y déjalos enfriar en el monde durante 10 minutos. Desmolda los bizcochos y deja enfriar por completo sobre una rejilla.
Monta la nata con ayuda de unas varillas y reserva.
Mientras está el bizcocho en el horno prepara el frosting. Bate con una batidora eléctrica a velocidad media el queso crema hasta obtener una crema aireada y cremosa, añade la mantequilla y la vainilla y bate hasta integrarla
Baja la velocidad de la batidora y añade gradualmente el azúcar glas en dos veces. Continua batiendo hasta obtener una crema esponjosa y homogénea.
Con ayuda de una espátula incorpora la nata montada a la crema de queso y mezcla hasta integrar. Reserva.
Corta la superficie del bizcocho con un cuchillo de sierra hasta igualarlos. Esto es opcional.
Coloca la primera capa del bizcocho y añade una capa generosa de frosting, extiende de forma uniforme. Cubre con la segunda capa de bizcocho y añade otra capa de frosting y repite el proceso.
Cubre las paredes del pastel con el resto de la crema. Refrigera el pastel durante 1 hora antes de servirlo.
Decora como más te guste.
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